En marzo de 1979 se modificó la Ley Indígena mediante el Decreto Ley 2598. Como consecuencia de esto, y a pesar del rechazo público por parte del Pueblo Mapuche, se produjo la división y la liquidación de las comunidades mapuche.
Esta modificación consiguió legitimar la propiedad privada al interior de los Títulos de Merced y constituyó hijuelas individuales: “(…) desapareciendo con ello no solo la propiedad colectiva, sino que el efecto más inmediato era la desintegración de la comunidad social y cultural tradicional, base de la identidad de Pueblo Mapuche”.