102 años se cumplen desde que nació, un 18 de julio de 1918, el expresidente sudafricano y líder contra el Apartheid, Nelson Mandela. La comunidad internacional lo recuerda y conmemora como una figura por la paz, que le dedicó su vida a la lucha por la liberación de Sudáfrica de toda discriminación racial y social.
Debido a su larga trayectoria como luchador y representante de las demandas de las comunidades excluidas de su país, principalmente la población negra, la Asamblea General de las Naciones Unidas, declaró en 2008, la fecha de su natalicio como el “Día internacional de Nelson Mandela”.
En diciembre de 2015 la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió ampliar el alcance de este día, utilizándolo para promover condiciones de encarcelamiento dignas, debido a los 27 años que Mandela pasó en prisión durante su lucha. De esta forma, la ONU creó las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos, y además aprobó que estas se denominen las «Reglas Nelson Mandela».
Madiba, como era reconocido cariñosamente por su comunidad, al ser electo presidente de su país tras la caída del Apartheid en 1994, impulsó un proceso de visibilización de los horrores cometidos por el régimen racista junto con un proceso de reconocimiento y reconciliación entre el pueblo sudafricano.
Dentro de las medidas que adoptó el país africano, estuvo la creación de una Comisión de Verdad y Reconciliación, que según comentó Mandela, en una visita del ex presidente Eduardo Frei en 1998, había seguido de cerca la comisión que trabajó en Chile tras la dictadura cívico militar.
“Cuando Sudáfrica buscó la manera de cerrar las heridas abiertas por la inhumanidad del Apartheid miró a Chile como una guía para establecer su Comisión de la Verdad y la Reconciliación”, declaró Mandela, y agregó: “es de esperar que sudafricanos y chilenos se interesen especialmente en sus experiencias mutuas… saben que el proceso de hacer frente a ese pasado es largo y difícil”.