COMUNICADO
Desde la RESLAC queremos denunciar la grave situación de violencia desatada en varias regiones de Colombia por el gobierno de Iván Duque desde el pasado 28 de abril, cuando tomó la decisión de militarizar la represión a la protesta social en las calles, con un saldo de más de 900 heridos, casi un centenar de personas denunciadas como desaparecidas y una veintena de muertos a manos de la fuerza pública hasta el día de hoy.
La pandemia expone a un número cada vez mayor de personas a una situación de extrema vulnerabilidad. Responder a esta grave situación humanitaria con políticas públicas regresivas y con disparos descargados sobre manifestantes civiles desarmados es incrementar los impactos ya violentos de la desigualdad, con mayor violencia. Nada bueno puede esperarse de decisiones tan temerarias que ponen en riesgo no sólo la vida y la integridad de los manifestantes sino además los logros alcanzados en el marco del proceso de paz, que con tanta dificultad se viene sosteniendo y acompañando desde las organizaciones de derechos humanos y organizaciones de base y comunitarias, ante el empeño del gobierno nacional de debilitarlo y deslegitimarlo.
Desde la RESLAC, queremos expresar nuestra total solidaridad con el pueblo que está siendo reprimido en las calles por intentar frenar reformas regresivas y sumarnos al reclamo por la desmilitarización, el respeto a la protesta y la implementación cabal del Acuerdo Final para la paz.