Se nos ha ido Oscar “Cuervo” Castro, actor, dramaturgo y director teatral chileno, y gran amigo del Museo de la Memoria y los DD.HH. En dictadura fue detenido y llevado a varios campos de concentración, en los cuales formaba grupos de teatro con otros prisioneros. En 1976, después de ser liberado, parte con su esposa y su hermana al exilio a Francia, donde refunda el Teatro Aleph en Ivry sur Seine. Entre las obras que montó en Europa está La triste e increíble historia del general Peñaloza y el exiliado Mateluna y La noche suspendida, premiada en 1982 como mejor texto y mejor director en el Encuentro con Charles Dullin en Villejuif.
Aquí puedes ver el testimonio de Óscar Castro, en Memorias de Exilio, un espacio de diálogo y encuentro desarrollado por el Museo de la Memoria y los DD.HH.
¡Vuela alto maestro del teatro!
