El 14 de noviembre se celebraron los cincuenta años de la Convención Unesco 1970 contra el tráfico ilícito de bienes culturales, que se creó con el fin de adoptar medidas para “prohibir e impedir la importación, la exportación y la transferencia de propiedad ilícitas de bienes culturales”.
La Conferencia que es considerada el primer instrumento jurídico internacional para la protección de estos elementos en tiempos de paz, es ratificada hoy por 140 estados que tratan de evitar a toda costa el tráfico.
Chile al suscribirse a esta convención por medio del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural y la Unidad y Mesa de Lucha contra el tráfico ilícito de bienes patrimoniales (TIBP) se ha dedicado al cumplimiento de los compromisos adquiridos, entre ellos, a la difusión de requerimientos de salida del país de bienes culturales protegidos.